Millones de hormonas moribundas me han quitado el deseo de mis manos trepando por tu cintura.
Millones de hormonas rojas moribundas desfilando hacia abajo.
Entre trago y calada nos recordamos lo mucho que hemos perdido el tiempo.
Entre trago y calada te robo las llaves del coche y te obligo a dormir en mi piso.
Millones de hormonas gritando ...hoy no!
...y despertarme agitado con el leve peso de tu cabeza en mi hombro...