De vez en cuando se cruzan por mi vida señoritas que nunca quisieron ser princesitas,ni llevar vestiditos,ni tener un príncipe azul.
Chicas que la única corona que quisieron llevar la llevaban de su mano,para beberla.
Hace ya tiempo conocí a una chica sencilla,de esas princesitas.
Hace tiempo que compartimos barra en el mismo bar mientras bebemos a nuestras rubias particulares y nos contamos el resto de nuestras vidas.
Hace tiempo que la echaba de menos en la cama...pero algo a cambiado...creo que ahora quiere ser princesita y yo,me temo,su príncipe azul.
De todas formas es natural...es más fácil subirse la falda que quitarse el pantalón.
PD: si,losé...la última frase es tuya,pero no se lo digas a nadie.
No quiero que me cuiden y ya no quiero cuidar de nadie.
No quiero acunar más corazones heridos ni tampoco que me curen el mio.
No quiero más miradas extrañas que antaño fueron queridas.
No quiero buscar a alguien que no existe.
No quiero nada de nadie.
No creo que cueste tanto de entender...
-Que edad dices que tienes?
-Diecinueve.
-Diecinueve????Joder,hoy no es mi día de suerte...
-Como?
-Miénteme y dime que tienes veintitrés,luego me lo agradecerás.
Caminábamos por la calle con la sonrisa afilada,la nariz fría y ella cogida de mi brazo.
Íbamos con la seguridad de quienes no necesitan hablar para entenderse.
Ella,colgada de mi brazo me hacía sentir una mezcla de orgullo y sosiego.
Y así,entre beso y beso,íbamos devorando las calles de mi vieja ciudad.
-No crees que hacemos buena pareja?
-Que?
Y la hago parar,me coloco detrás suyo,la abrazo y repito:
-No crees que hacemos buena pareja?-mientras señalo nuestra imagen en un escaparate.
Nuestras sonrisas reflejadas en el cristal confirman mis sospechas.
Ese día,en ese momento,hacíamos una gran pareja.
Luego,como siempre,el reflejo de esa gran pareja desapareció con el tiempo.
Ella sonreía mucho.
Su sonrisa era exageradamente grande, mostraba todos los dientes y las encías. Era despreocupada, inocente, extrovertida.
Hace ya tanto tiempo que no me acuerdo cómo empezaba.
Los músculos ya están flácidos, y las arrugas esconden la expresividad que le queda.
Sonreía sola o acompañada, por la calle o encerrada.
Ella era su sonrisa, todos lo decían.
PD: seguro que sonríes al verte nuevamente copiada...
-A mi también me harás lo mismo que a las demás?
El chico se queda mirando el suelo,queriéndola convencer que ella siempre fue la única,que las demás solo fueron sustitutas,alivios rápidos de su cobardía.Pero solo mira el suelo...
La chica,apenada,se gira y coge el camino de vuelta.
-Pero...yo te quiero!-espeta el chico en un último intento.
-Lo siento...no te puedo creer-dice la chica sin girarse.
El chico vuelve a mirar el suelo...lleno de impotencia y rabia.
Y grita: os maldigo a todas por no dejarme estar con ella!!
-A ver Hugo,yo soy una tía de hormigón,con muy mala leche,que no le gusta que la abracen,te queda claro?A mí,ni tocarme.
-Si ahora mismo te pusieras delante mio,desnuda,y me dijeras algo así como "tómame", cogería una manta,te la pondría por encima,te besaría en la frente...y te daría las buenas noches.No lo puedo evitar.Ya no eres la que encendía mis hormonas,ahora eres "ella",que no es poco."Te queda claro?"
PD: "no me abraces que me coge claustrofobia, bésame fuerte pero no te acerques demasiado...." como siempre,ando plagiandote.
La niña triste vive en un mundo alegre de películas y zapatitos rosas.
La niña triste es feliz pese a su cara de eterna de tristeza.
Hoy,la niña triste,está esperando su turno en la consulta del médico.A su lado hay una chica joven,embarazada de unos meses,con cara de tristeza.
La chica joven se toca la barriga y mira el vacio...la niña triste la observa... de repente lo ve claro.
La niña triste rompe a llorar,la gente se sobresalta,le preguntan que le pasa..sale un médico.
-Pequeña,te duele algo?
La niña triste,entre sollozos y sorbiendo mocos contesta : no quiero que me crezca la tristeza en la barriga...
Todo el mundo mira ahora a la chica joven embarazada...está pálida,con los ojos muy abiertos,se aprieta con fuerza la tripa...hasta que sale corriendo de la consulta dando un portazo.
Todo el mundo calla...se oyen unas ruedas chirriar...y un golpe.
Todo el mundo calla y la niña triste llora.